Tras anunciar que si iba el fichaje, se complicó el fin de semana. El lunes igual se chequeó médicamente y hoy lo anuncian. Gian incluso dice que si hizo su sueño realidad y va ante el Mallorca
Desde la semana pasada, ya el rumor había aparecido en el ambiente. Desde México, reportaron un interés por Giancarlo Maldonado que venía desde España, especificamente del Xérez, un recién ascendido.
El venezolano no fue el semestre pasado el mismo que se llevó la Bota de Oro de las Américas en 2007 junto a Martín Palermo. Tuvo un gran bajón: su cuerpo estaba en Cancún, pero su mente en Europa.
Toco las puertas varias veces, e incluso viajó a esos lugares, pero se la cerraron en cara. Primero, fue el Colonia alemán. Cuando estaba todo listo, fue devuelto a casa. Recayó en un desconocido O Higgins chileno, donde a punta de goles recobró la confianza.
De ahí le valió el salto a México. Brilló y esperaba dar el salto a Europa. Clubes como el Osasuna, Deportivo La Crouña o Everton inglés le pretendían, pero siempre había algo que impedía su salida cuando parecía anunciada y pactada.
El jueves pasado pudimos hablar con él en exclusiva, aún en México, pero por traumas anteriores se mantenía cauteloso. Aunque reveló: “jugar en España es lo máximo”.
El viernes siguiente partió a España, sabiendo que el lunes serían los exámenes médicos. Sin embargo, sábado y domingo fueron realmente tormentosos. Atlante acusaba al Xérez de no querer pagar lo justo, mientras Xérez decía que el club mexicano no era totalmente claro, alteró montos pactados y que se les agotaba la paciencia.
En medio de este torbellino, Giancarlo se realizó su chequeo médico y salió bien, a pesar de las informaciones cruzadas. En la noche del lunes, el presidente del Atlante había dicho que “estaba listo”.
En la mañana de hoy martes el Xerez, en un comunicado hizo oficial el traspaso. Fuentes extraoficiales informaron que lo que destrabó la negociación fue que Giancarlo renunció a una importante suma de dinero para realizar su sueño.
